domingo, 28 de febrero de 2010

La noticia de la semana

Soy consciente de que esta entrada no va a gustar a muchas personas. Así que va firmada con mi nombre y apellidos. Y pido disculpas por anticipado a quien pueda sentirse molesto/a por lo que viene a continuación.

Me hubiera gustado, como otros domingos, realizar el consabido repaso semanal a la blogosfera. Sin duda ha habido temas interesantes tratados en múltiples bitácoras sanitarias...

... Pero lo cierto es que desde el 25 de febrero hay un tema que ha centrado mi atención. Un tema que ha pasado "de tapadillo" incluso en los grandes medios de comunicación. Parece que no ha llamado mucho la atención, a pesar de la seriedad y gravedad (en mi opinión) del tema.

Ese día de febrero se publicó la aprobación en el Senado de la nueva Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).

Entrando en detalles: aborto libre hasta la 14 semana de gestación. Después de la semana 22, no hay límite si el feto padece una enfermedad de extrema gravedad o incurable.

Soy contrario al aborto desde que tengo memoria. Mi oposición al mismo ha sido y es, además, algo independiente de cualquier credo religioso o político. Simplemente, no puedo comprenderlo. No he podido nunca y, aunque he escuchado decenas de razones a favor del mismo, la mayoría me parecen falsas y egoístas. Es cierto que cada persona tiene su propio sistema de creencias y valores. ¿Acabar con la vida de un niño en formación puede tener cabida en alguno de esos sistemas?

No puedo comprender que un país como España, que ha suscrito la Convención de Derechos del Niño, los olvide desde su mismo preámbulo:

"Teniendo presente que, como se indica en la Declaración de los Derechos del Niño, “el niño, por su falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidado especiales, incluso la debida protección legal, tanto antes como después del nacimiento

Es muy hipócrita adherirse a convenciones y declaraciones, señalar  con el dedo a países que no las han suscrito... y luego incumplir lo firmado.

Podemos consultar también la Declaración de Derechos Humanos, que a estas alturas no necesita de ninguna presentación. Podemos consultar el artículo 25.2:

"La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. Todos los niños, nacidos de matrimonio o fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social"

La Ley de la IVE  recién aprobada (y que declara el aborto libre hasta la 14 semana), ¿entra dentro de esos "cuidados y asistencias especiales" para la maternidad?

Realmente, en caso de embarazo no deseado, ¿nuestro sistema sanitario para qué está diseñado? ¿Para ofrecer ayudas y apoyo a la embarazada o para darle la dirección más cercana de una clínica autorizada para realizar IVEs?

Estamos en un estado de derecho. ¿Los niños no nacidos carecen de ellos?

¿Qué entienden nuestros políticos por enfermedad muy grave o incurable del feto? Por supuesto que hay enfermedades graves e incurables. También es cierto que algunas de ellas, sobre todo algunas tributarias de corrección quirúrgica, pueden beneficiarse de técnicas de cirugía fetal. La cirugía fetal está cambiando el pronóstico de la enfermedad de muchos niños antes considerados como incurables. Mielomeningoceles, cardiopatías congénitas complejas... De ello hablé en una entrada de este blog hace unos meses. ¿Cuantas unidades de estas existen en España? Existen algunas, es cierto. ¿Son suficientes? ¿Se las va a potenciar? ¿Se van a crear otras nuevas?

¿En qué momento hemos perdido el respeto a la vida humana? ¿En qué momento nos hemos perdido el respeto a nosotros mismos?

Acabo esta entrada como la he comenzado: pido disculpas por anticipado a quien pueda sentirse molesto/a por lo que he escrito.

José Cristóbal Buñuel Álvarez
Pediatra

8-10 semanas de gestación


10-11 semanas de gestación

9 comentarios:

kaizen dijo...

Hola:

Efectivamente tu opinión puede suscitar comentarios de todo tipo.

Por mi parte encuentro muy interesante tu enfoque pero no estoy 100% de acuerdo o como mínimo no lo veo 100% claro.

Tampoco sé cual es la solución.

Tienes razón que con la ley es muy fácil abortar cuando realmente no hay una razón de peso para hacerlo. Primer problema definir razón de peso.
Otro tema es cuando podemos decir que el feto es un niño? De tus palabras se puede deducir que es niño a la ya. Pero realmente es así?

Desde mi punto de vista hay varios puntos que pueden ser muy complicados de definir, pero estoy de acuerdo contigo que gracias a la ley el estado se puede ahorrar máquinas, esfuerzos para salvar la vida de un niño(o futuro niño).

Saludos y en cualquier caso, gracias por compartir tus pensamientos.

Juana dijo...

He estado horas y horas y horas y .... en una sala de terapia, por el puro placer de entender y comprender este mundo, a los que me rodean, a mi familia, a mi misma, lo que se escucha es de un calibre que asusta.
Mi posición ante el aborto es que ellas deciden, yo apoyaré cualquier cosa que ellas decidan, sea lo que sea lo que prefieran.
Me alegro de que esta Ley, que es muy amplia, haya sido aprobada.

Antonio R. dijo...

Yo tambien estoy de acuerdo contigo. Soy contrario al aborto y las opiniones que oigo a favor me parecen hipócritas, falsas y sobre todo poco meditadas. Todavía hay mucha gente que sigue considerando "progre" el estar a favor de abortar y reaccionarios a los que estamos en contra. En mi blog publiqué una serie de videos ecográficos (http://aplamancha.blogspot.com/2009/05/entonces-que-es-esto.html)en los que preguntaba a la Sra Ministra si "eso",un feto de 12 semanas, no era una persona entonces ¿Qué era?. DEsgraciadamente, la sociedad anestesiada en la que vivimos no se moviliza frente a estas y otras aberraciones , sólo siguen como borregos a quien aparece mucho en televisión y les da poco más de cuatrocientos euros para malvivir todos los meses ó subvenciones para vivir sin trabajar el resto de sus vidas . UN saludo

kaizen dijo...

Antonio R. y Cristóbal. Lo que me cuesta de aceptar es que una cosa tan complicada como el aborto se pueda simplificar en blanco y negro. Contrario o no. ¿Aceptáis que pueden haber matices? Que no hay blancos y negros y que probablemente tenemos que mirar los grises? Digo eso independientemente de las leyes del gobierno y sociedades anestesiadas.

Rubén Roa dijo...

Pues bien, y a riesgo de ser criticado como reaccionario y cualquier tipo de adjetivos. Defiendo la anticoncepcion, y sin duda el mejor es la educacion. El aborto no es una solucion, sino una desgracia para la propia persona que debe hacerselo. Debieramos usar mejor nuestra imaginacion para evitar los embarazos no deseados, o no queridos mejor dicho. Alguna vez hice un juramento pagano. Juramento al fin, y al cual me atengo. No soy un dios para decidir la vida o la muerte. Tan solo un medico que acompaña a sus pacientes en distintas etapas de su vida. Y a veces, las menos, hasta logro curar. Coincido con vos.

Fredo dijo...

Estoy con kaizen, no todo es de color blanco o negro. Existen casos y casos. No se puede generalizar. Me parece bien que exista una ley que intente regular esto, aunque como en todo, hecha la ley, hecha la trampa y en este caso estaremos jugando con la vida de un ser humano. Los casos de IVE que deberían existir deberían ser los mínimos, y en mi opinión no lo serán.

Anónimo dijo...

En primer lugar, quiero felicitar a José Cristóbal por su valentía y honestidad al publicar este artículo. En segundo lugar, estoy de acuerdo con Rubén: el aborto es una maldita desgracia, para el nasciturus, que como persona es portadora de derechos y no digamos para la madre. Por supuesto que no hay blancos y negros, sino una complejísima gama de grises, en la que entran la educación y la prevención primero y el apoyo incondicional después. Pero en sí mismo, el aborto NO es una solución en la inmensa mayoría de los casos. Lástima no haber podido votar esta Ley. Y lástima que los que pensamos como José Cristóbal o Rubén, temamos ser insultados, vilipendiados, descalificados. En cualquier caso, si defender la vida es ser reaccionario (dónde vamos a llegar), es un orgullo serlo...

Agustín Losada dijo...

kaizen:

No, no puede haber matices. Ante la vida o la muerte no hay términos medios. O estás a favor o en contra. Como el embrión es un ser humano, cualquier atentado a su vida es una violación (consentida y legalizada o no) de los DDHH. Este tema es realmente, el más grave de nuestro tiemnpo. No se trata de una cuestión religiosa, sino de índole antropológica: Si no respetamos la dignidad del ser humano estamos construyendo una sociedad cada vez más deshumanizada, donde será cada vez más difícil vivir.

Gonzalo dijo...

Cristóbal: agradezco mucho tus palabras. Y a mí me ayudan mucho. Porque consuela saber que hay médicos como la copa de un pino que piensan como tú.
Creo que no hay matices. Tampoco los hay con la ablación de clítoris, ni con la esclavitud, ni con la violencia de "género".
Pero nos hemos dejado engañar.
Como decía Gregorio Marañón: mal van las cosas cuando hay que dar razones para argumentar la evidencia (como bien sabes la evidencia no es lo mismo que las pruebas...)
Un abrazo muy grande y gracias por esta entrada. Para mí ha sido un regalo.