viernes, 1 de julio de 2011

La obesidad infantojuvenil es una enfermedad social

Del gravísimo problema del sobrepeso y obesidad infantojuvenil nos hemos ocupado en diversas ocasiones en este blog. Uno sigue teniendo la impresión de que este tema sigue sin ser vivido como "problema". O que se piensa en él como problema secundario. No se es consciente de que el sobrepso-obesidad es una auténtica bomba de relojería. Ya se habla de que, después de varias décadas, la actual generación de niños puede vivir menos que la de sus padres debido a la obesidad y sus múltiples repercusiones negativas sobre la salud.

Acaban de ser presentados por parte de la ministra de sanidad los resultados del estudio de prevalencia de sobrepeso-obesidad infantojuvenil ALADINO, acrónimo de "ALimentación, Actividad física, Desarrollo INfantil y Obesidad". Y son preocupantes. Casi la mitad de nuestros niós y niñas (45,2%) tienen exceso de peso. El hecho de que parece ser que en los últimos 10 años se ha producido un estancamiento en la prevalencia (es decir, no estamos peor), no puede servirnos de ningún consuelo: no se ha lograda reducir la misma. Estamos fracasando.

Hay algunos datos más que merece la pena resaltar:
  • El sobrepeso-obesidad es más frecuente en niños/as que comen en su casa en vez de el colegio.
  • La prevalencia es más elevada entre quienes pasan más tiempo con ordenadores y juegos electrónicos (relación con el sedentarismo).
  • La prevalencia es más elevada entre las clases sociales más desfavorecidas. Este último hecho, no por conocido debe ser minimizado. Estamos en plena crisis económica y mucho me temo que cada vez más personas van a pasar a formar parte de este estrato social socioeconómicamente más pobre y, por consiguiente, más vulnerable.
El sobrepeso-obesidad como enfermedad social no es nuevo. Hace unos días podíamos ver, en el blog "Synaptica", un gráfico de Google sobre la distribución de la obesidad por barrios en la ciudad de Nueva York. La prevalencia más alta se daba en el barrio más pobre (Bronx). La más baja, en el más rico (Manhattan). El gráfico lo podeis ver en el encabezamiento de esta entrada.

Os dejamos la presentación del estudio ALADINO, realizado por la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN). Motivo para el estudio y la reflexión de todos.

2 comentarios:

Vicente Baos dijo...

Hemos coincidido en la visión del problema. Saludos

cristobal dijo...

Así es, Vicente ;-)