sábado, 5 de agosto de 2023

Cine y Pediatría (709) Zoe, Vicky y muchas otras historias de amistad con animales

 

La infancia llevan la pasión por los animales en sus genes, y en ocasiones éstos se convierten en el mejor aliado para afrontar situaciones difíciles, grandes experiencias vitales y superar el rito de iniciación a la adolescencia. La mayoría de ellas son películas con valores para ver en familia con nuestros hijos o nietos. Películas desde diversas nacionalidades, pero con un predominio desde Estados Unidos y Francia. He aquí un recordatorio de alguna de ellas

a) Estados Unidos 

- Mi amigo Flipper (James B. Clark, 1963), una película y un delfín cuyo nombre ha quedado para siempre en el imaginario colectivo y que todos quisimos tener de amigo, como el pequeño Sandy (Luke Halpin). Esta película fue adaptada tres décadas después en Flipper (Alan Shapiro, 1996), con Elijah Wood en el papel del niño Sandy. 

- El corcel negro (Carroll Ballard, 1979), que se consagraría como la aventura por antonomasia protagonizada por un caballo y un niño, Alec (Kelly Reno). Ambos son los únicos supervivientes al naufragio del barco en el que el niño viajaba con su padre y quedó fascinado por el caballo árabe que transportaban en un establo. 

- ¡Liberad a Willy!' (Simon Wincer, 1993), donde esta orca tomó el relevo del carismático Flipper en la que se ha convertido en una de las aventuras más populares protagonizadas por este otro cetáceo y el niño Jesse (Jason James Ritcher), en una obra que es una modesta crítica a la naturaleza de los centros zoológicos. 

- El pequeño panda (Christopher Cain, 1995), donde el niño Ryan (Ryan Slater), junto a una niña tibetana, tratarán de salvar a una adorable cría de oso panda perseguida por unos cazadores furtivos. 

- Balto: la leyenda del perro esquimal (Simon Wells, 1995), película de animación sobre Balto, el lobo esquimal que hizo posible que la encantadora niña Rosy obtuviera la antitoxina para combatir la epidemia de difteria, y ello a pesar de los cientos de kilómetros que el animal tuvo que atravesar bajo la tormenta ártica. 

- Volando libre (Carroll Ballard, 1996), donde este director regresa de nuevo para otra historia entre un infante y un animal, ahora entre la niña Amy (una jovencísima Anna Paquin), que hereda de su padre el amor por los animales tras años de trabajo en una pequeña granja canadiense, y un nido de gansos huérfanos, a los que decide criar y enseñarles a volar, asumiendo finalmente que deben migrar hacia una zona más cálida. 

- El hombre que susurraba a los caballos (Robert Redford, 1998), la conocida historia entre la niña Grace (una adolescente Scarlett Johansson) y su caballo Pilgrim, quienes resultan gravemente heridos en un atropello, y ese vaquero que posee un don especial para hablar y curar a los caballos, interpretado por el propio director. 

- Mi perro Skip (Jay Rusello, 1999), donde Willi (Frankie Muniz), un tímido niño con dificultades para relacionarse, encuentra su tabla de salvación en el cachorro de terrier, por nombre Skip, y que sus padres le regalan por su noveno cumpleaños. 

- Duma (Carroll Ballard, 2005), regresa esta tercera película de este director con un un tema que ya ha explorado antes, ahora en un rancho de Kenia donde el niño Xan (Alex Michaeletos) se ve inmerso en la cría de un guepardo huérfano, Duna, sobre el que debe afrontar el regreso del animal a su hábitat natural. 

- Frankenweenie (Tim Burton, 2012), una de las peculiares películas de este peculiar director, la historia del pequeño Víctor, que tras la muerte de su querido bull terrier, Sparky, lleva a cabo un experimento científico para traerlo de nuevo a la vida. Mediante el guiño al mito de Frankenstein, la película supone un buen material para trabajar con los más pequeños de la casa la gestión de la pérdida de las mascotas. Película basada en el cortometraje homónimo que el propio Burton realizó en 1984 y donde el papel del niño Víctor Frankestein estuvo interpretado por Barret Olivier. 

b) Desde Francia 

- Crin blanca (Albert Lamorisse, 1953), un mediometraje de 36 minutos sobre esta historia de amistad entre el niño Folco (Alain Emery) y un caballo blanco salvaje que escapa de unos rancheros. Una fantástica oda a la libertad que caracteriza la naturaleza salvaje del animal y esa etapa llamada infancia. 

- Dos hermanos (Jean-Jacques Annaud, 2004), donde dos tigres del sudeste son separados al nacer, criados en cautividad y presentan vidas muy distintas: uno es convertido en una estrella de circo, el otro será entregado a un príncipe que le enseñará a pelear. Y se reencontrarán de una complicada manera. 

- Una amistad inolvidable (Luc Jacquet, 2007), historia de amistad entre un zorro y una niña (Bertille Noël-Bruneau), la que cambia por completo la vida de esta pequeña, descubriéndole un mundo salvaje totalmente secreto para ella hasta el momento. Y lo consigue combinando imágenes de documental de naturaleza con ficción. 

- Nicostratos le pélican (Olivier Horlait, 2011), ópera prima que nos deja esta aventura protagonizada por Yannis (Thibault Le Guellec), un niño de 14 años que vive en una isla griega, y su peculiar nuevo compañero de viaje, Nicostratos, un pelícano al que salva de una muerte segura. 

- Belle y Sebastian (Nicolás Vanier, 2013), adaptación de la famosa novela de Cécile Aubry que también fue llevada a la televisión francesa con gran éxito en los años sesenta, donde Sebastián (Félix Bossuet), un niño solitario que vive en un pequeño pueblo de los Alpes, encuentra a un perro salvaje, al que domestica y llama Belle, pero donde su tranquilidad se ve truncada por la llegada de los alemanes en el marco de la Segunda Guerra Mundial. 

- Aves de paso (Olivier Ringer, 2015), donde Cathy (Clarisse Djuroski) recibe un curioso regalo de cumpleaños de su padre: un patito que aún no ha nacido y cuyo huevo debe incubar con precaución. Pero el azar decide que la primera en presenciar el nacimiento del patito no sea Cathy, sino su amiga Margaux, afecta de una grave discapacidad. El patito la ha identificado como su madre, pero sus padres no quieren hacerse cargo de él. Para proteger y salvar al pato, las dos niñas se escapan y emprenden una aventura de libertad que pone en tela de juicio la sobreprotección de sus padres. 

- Mia y el león blanco (Gilles de Maistre, 2019), la relación entre la joven Mia (Daniah De Villiers) y Charlie, un cachorro de león blanco, al cual tendrá que proteger de su venta a los cazadores una vez el animal llegue a su edad adulta. 

- El lobo y el león (Gilles de Maistre, 2021) nos presenta a una joven llamada Alma (Molly Kunz) que, tras la muerte de su abuelo, regresa a la casa de su infancia en una isla de Canadá. Allí, su vida da un vuelco cuando rescata a un cachorro de lobo y a un cachorro de león. A medida que los animales crecen, los tres forman un vínculo inseparable, pero la vida les obligará a seguir caminos distintos y vivir experiencias duras hasta que puedan volver a encontrarse. 

- Flora y Ulises (Lena Khan, 2021), basada en la novela de Kate DiCamillo, parte de una premisa tan original como sorprendente: narra las aventuras de una niña, Flora (Matilda Lawler), y una ardilla con superpoderes, por nombres Ulises. 

c) Desde otras nacionalidades 

- Kes (Ken Loach, 1969), la particular relación entre Billy (David Bradley), un introvertido niño que no tiene demasiado entusiasmo por la escuela y de comportamiento peculiar, y un halcón, al que un día encuentra y le cuida hasta que consigue pueda llegar a volar. Reino Unido. 

- El perro mongol (Byambasuren Davaa, 2005), historia en clave documental de Nansal (Nansal Batchuluun), la hija mayor de una familia de nómadas mongoles, quien encuentra un cachorro en el campo y se encapricha rápidamente de él, pero su padre prefiere deshacerse del animal, ya que podría haber convivido con lobos, lo que según la tradición traerá mala suerte a la familia. Alemania. 

- Tahaan (Santosh Sivan, 2008), road movie que narra la particular lucha del niño Tahaan (Purav Bhandare) por traer de vuelta a la mascota de su pobre familia, el burro Birbal, que les ha sido sustraído también por el usurero local. India 

- Kauwoy (Boudewijn Koole, 2012) es la particular Kes holandesa, aunque en esta ocasión el halcón es sustituido por un grajo que, a modo de metáfora, permite superar al pequeño Jojo (Rik Lens) la ausencia de su madre. Paises Bajos 

- Celestial Camel (Yuriy Feting, 2015), particular road movie que sigue el viaje por la estepa de un niño de 12 años llamado Bayir (Mikhail Gasanov) en busca del camello Mara. Rusia 

- Hermanos del viento (Gerardo Olivares, Otmar Penker, 2017), donde el niño Lukas (Manuel Camacho, el mismo niño que luego actuaría también en Entre lobos), trata de salvar la vida de una cría de águila real que se ha caído de un nido. El joven cuida del ave en secreto, buscando así el amor y la compañía que no tiene en su propia casa. Austria. 

Pues bien, a este listado podemos sumar otras dos recientes películas francesas sobre la amistad de dos niñas con animales, emotivas cintas familiares para ver en familia, y que hoy destacamos. 

Zoe y Tempestad (Christian Duguay, 2022) 

Nos sitúa en un pequeño pueblo de la costa de Normandía, enero 2001. En la primera escena aparecen unos caballos corriendo en la playa; a continuación coincide en un establo el parto de una yegua, Bella Intrigante, y la propia veterinaria. Es lo primero que comparten la niña Zoe y Konspirador, y por ella la niña llegará a preguntar: “¿Es verdad que yo nací en el establo y que Konspirador en mi gemelo?” 

Y entre bellos paisajes (con carreras de caballos trotones - sulky -, hasta con el Mont Sain Michel de fondo), hermosa fotografía y música, Zoe nace y se cría entre caballos, una vida feliz impulsada por el sueño de convertirse algún día en jinete, al igual que su padre, dueño del establo. Luego un salto al verano de 2012… y Zoe (Charlie Paulet a los 10 años, Carmen Kassovit de adolescente) ha visto que ahora nace el potro Tempestad. Y es precisamente con una tempestad, que se provoca la tragedia, pues el potro se asusta y patea en la espalda a Zoe, lo que la aboca a una silla de ruedas por una paraplejia. Zoe no recibe nada bien su nueva situación. Y es ahí que se establece una especial relación con el ayudante de la cuadra afecto de un cierto retraso mental, Seb (Kacey Mottet-Klein, ya un habitual en Cine y Pediatría en películas como Home, ¿dulce hogar?, Sister, Cuando tienes 17 años y El acontecimiento) atendiendo al rechazo que Zoe adquiere a seguir viviendo. Una historia edulcorada de superación.    

- El secreto de Vicky (Danie Imbert, 2021) 

Filmada en la región francesa de Auvergne-Rhône-Alpes. A esta maravillosa región montañosa se traslada un padre con su hija de 8 años, Victoria (Shanna Kell), quien ha entrado en mutismo desde que murió su madre. Durante un paseo por el bosque, un pastor le regala a la niña un cachorro llamado Mystère y con este animal comienza a hablar y abrirse al exterior. Pero tiempo después se descubre que el cachorro no es un perro, sino un lobo... y la familia sufre las presiones de los ganadores sobre el peligro de la situación, por lo que al padre no le queda más remedio que separar a su hija de este cachorro que acaba por convertirse en un lobo y debe regresar con su manada. 

Paisajes, fotografía, música, la historia de amistad y los valores asociados hacen de esta película una agradable recomendación para ver en familia. Y con esa despedida de Vicky a Mystère: “No puedes vivir con las personas. Es demasiado peligroso. Y yo no puedo vivir con los lobos. ¿Lo entiendes? Nadie podrá separarnos, no te preocupes. No te olvidaré”. Destacar la banda sonora de Armand Amar, este particular director de música que ya nos ha dejado su particular estilo en Cine y Pediatría su melodías en películas como Vete y vive (Radu Mihaileanu, 2005), El primer grito (Gilles de Maistre, 2008), Mi planta de naranja lima (Marcos Bernstein, 2012) o Una bolsa de canicas (Christian Duguay, 2017).

Y con películas así y mensajes así, el alma queda en calma… en estas historias de amistad con animales de nuestros protagonistas de la infancia, con Zoe, Vicky y tantos otros.

 

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